“El AutoGLP llegó para quedarse en Colombia”, GASNOVA
Para Alejandro Martínez, presidente de la Asociación Colombiana del GLP – GASNOVA, los nuevos usos del Gas LP en vehículos terrestres y náuticos se convierte en una interesante alternativa para el transporte público y de carga, más eficiente y de enormes rendimientos.
¿Cuál ha sido la evolución en Colombia del Gas LP (GLP) y su incidencia en la distribución de combustibles?
En la actualidad el Gas LP es utilizado en Colombia por 3,4 millones de hogares, es decir 12 millones de personas en 1.050 municipios del 95% del territorio nacional. Su principal uso es como energético para cocinar, pero con la nueva Ley de Gases Combustibles se están impulsando otros usos como el combustible vehicular y náutico (AutoGLP y NautiGLP), generación eléctrica en zonas no interconectadas y reemplazo de la leña en 6 millones de personas que todavía no cuentan con una energía limpia para este propósito.
El Gas LP fue declarado por el gobierno colombiano como servicio público domiciliario esencial, y durante el año 2021 registró un consumo anual de 700 mil kilogramos que fueron utilizados principalmente en los sectores residencial (70%), industrial (16%) y comercial (8%).
¿Cuáles son las diferencias concretas entre el AutoGLP y el GNV como combustibles en autos dedicados y convertidos?
El AutoGLP y el GNV son dos combustibles para motores, hechos a base de gases combustibles, pero su diferencia principal es que el AutoGLP está hecho a partir de Gas LP (GLP). Es una alternativa incluida en la canasta de energías limpias de Colombia, ya que su uso permite una reducción del 21% en las emisiones de CO2 y la disminución de 81% de material particulado.
El Presidente Iván Duque destacó el papel del Gas LP vehicular como energía limpia a ser tenida en cuenta en la transición energética hacia la que marcha el país, y recordó que en diciembre del 2021 se dio el primer paso para el abastecimiento del AutoGLP en estaciones de servicios, con la expedición de la regulación que abre las puertas para usar este combustible en medios de transporte terrestre y fluvial.
Por su parte, el Gas Natural Vehicular (GNV) está hecho ¬-como su nombre lo indica-, de Gas Natural y también es una energía limpia que ya se viene utilizando en el parque automotor colombiano desde hace algunos años.
Entre las principales diferencias entre ambos combustibles, está el poder calorífico, que permite a los automóviles que antes funcionaban con gasolina o diésel, conservar su potencia: el AutoGLP tiene un mayor poder, por lo cual una tanqueada rinde más y explica porqué a nivel mundial camiones y vehículos de carga lo prefieren sobre otros combustibles. Otra diferencia es el tamaño del tanque de almacenamiento del combustible, que en el caso del GLP es mucho más compacto, generalmente en forma de donut (rosquilla), y se puede albergar en el espacio del baúl donde se guarda la llanta de repuesto, lo cual evita que le reste espacio al maletero.
¿Cómo viene evolucionando la conversión de vehículos y la importación de vehículos dedicados en este segmento?
Quizás el factor más decisivo para impulsar la masificación del AutoGLP, es lograr explicarle a los usuarios en cuánto tiempo podrán recuperar la inversión de conversión de sus vehículos. Si bien en un comienzo las empresas privadas pueden tomar la iniciativa de hacer dichas conversiones de manera gratuita o a muy bajo costo, a largo plazo sería económicamente inviable. Por eso las experiencias internacionales en países donde el GLP es ampliamente utilizado, señalan que se requiere la ayuda del Gobierno Nacional para impulsar las conversiones de vehículos.
¿Cuáles son las ventajas del GLP como combustible vehicular?
Para los usuarios tiene ventajas ambientales, ya que es mucho más limpio que la gasolina y el diésel. También cuenta con un alto poder calorífico que permite a los motores conservar su potencia al ser convertidos al AutoGLP.
Para los inversionistas también tiene ventajas como la baja inversión requerida en el montaje de estaciones o puntos de abastecimiento de AutoGLP, y su facilidad de transportarlo a cualquier territorio para abastecerlo a los usuarios.
¿Cómo se viene dando la masificación del GLP a través de las estaciones de servicio?
Actualmente ya hay estaciones de suministro en ciudades de la costa Caribe como Barranquilla y Cartagena, en el interior del país (Fusagasugá, Cundinamarca) y en el sur (Pasto, Nariño). Ahora se requiere adoptar una amplia red de estaciones que debería priorizarse en ciudades colombianas como Medellín, Bogotá, Cali, Pereira, Bucaramanga y Cúcuta, aprovechando la red de 5.700 estaciones de servicio que las empresas distribuidoras de combustibles tienen operando en todo el territorio nacional.
¿Qué empresas han venido impulsando el abastecimiento de GLP en las estaciones y en qué segmentos vienen trabajando?
Empresas como Terpel, que tiene una amplia red de estaciones vienen liderando este proceso. Y dentro del sector del Gas LP, hay compañías interesadas en este negocio, como Montagas, entre otras.
¿Por qué el AutoGLP llegó para quedarse en Colombia? ¿Qué experiencias exitosas se tienen en América Latina y el mundo de su uso?
El AutoGLP llegó para quedarse en Colombia porque el gobierno entendió las ventajas socio ambientales y económicas de este combustible limpio, que hace parte de la canasta energética y se concibe como una gran alternativa para el sector del transporte de servicio público (taxis y buses) y los vehículos de trabajo pesado (camiones).
En cuanto a las experiencias exitosas, según datos de la World LPG Association (WLPGA), en el mundo existen 81.474 estaciones de servicio que abastecen AutoGLP a 27’749,537 vehículos y una demanda total de 24 millones de toneladas.
Los países con mayor consumo de este combustible a nivel internacional son Turquía (4,6 millones de vehículos), Polonia (3,2 mill. de veh.), Rusia (3 mill. de veh.) e india (2,5 mill. veh.). Por su parte, en Latinoamérica hay 1 millón de vehículos con AutoGLP, 5.067 estaciones y una demanda total de 2,27 millones de toneladas; los países con mayor penetración son México (407 mil automóviles), Perú (240 mil autom.) y República Dominicana (230.000 autos).
¿En su perspectiva, qué papel juegan los distribuidores minoristas de combustibles en el proceso de masificación del GLP? ¿Existe una guía de cómo participar en este nuevo mercado?
Las distribuidoras minoristas y los inversionistas poco a poco se están involucrando en el AutoGLP. Para un mejor entendimiento de cómo funciona a nivel regulatorio este combustible, desde la Asociación Colombiana del GLP – GASNOVA hemos desarrollado un documento de análisis que se llama ‘Boletín Jurídico – AutoGLP y NautiGLP’, publicado en el sitio web www.gasnova.co sección ‘Documentos clave / Análisis / Boletines jurídicos’, el cual contiene una explicación detallada de cómo funciona este sector.
¿Cuál es su visión de la transformación que viene dándose en este sector que evoluciona cada vez más hacia combustibles limpios y sostenibles?
El mundo actual requiere de la disminución en el uso de los combustibles fósiles. Mientras esto sucede, el Gas LP es una de las opciones más eficientes dado que es una energía limpia, disponible en cualquier zona del país y del mundo.
Pensando en la transición energética hacia la que el planeta gira y que en el año 2050 será inminente, desde el sector del Gas LP se trabaja en la consolidación de una energía renovable llamada BioGLP (Gas LP renovable) que es 80% más limpia que el GLP convencional. En Europa y Estados Unidos el BioGLP ya se está comenzando a distribuir, con la ventaja de que no se requiere cambiar ningún gasodoméstico; y en Latinoamérica, países como Chile y Brasil ya cuentan con plantas y en el mediano plazo será tenido en cuenta como alternativa.